sábado, 31 de enero de 2009

dosmilocho4girls. Nuestras apuestas para 2009

E: Parece mentira que haga ya un mes desde que empezó este año. Y para acabar nuestra tanda de listas de 2008, la que sigue es la que recoge nuestras apuestas y lo mejor para 2009. Nos hemos tomado nuestro tiempo (bueno, más bien yo, porque Raül tenía muy claro las suyas desde el principio), pero finalmente hemos conseguido una recopilación bastante suculenta de lo que serán los must de este año, con lo que os daremos la brasa durante los meses que siguen y de los que esperamos que formen parte de nuestras recopilaciones (y de las ajenas) de lo mejor del año dentro de once meses. ¿Apostamos algo?

1R. Passion Pit. ¿Por qué? Porque... os lo venimos avisando desde hace un par de meses: su primer EP, Chunk of Change, es simplemente excepcional. Bastará que saquen un disco con 10 temas a ese nivel, y tened por seguro que los de Pitchfork se aprenderán la canción de Astrud para cantarles en medio de la pista eso de "Tú y yo, a la fiesta... Una felación!". MYSPACE

2E. Empire of the Sun. ¿Por qué? Porque... ya hace semanas que el río suena susurrando su nombre y el de algunos de los temas de su disco, Walking on a Dream. Su estilo es un curioso híbrido entre el dance de Ladyhawke y el rollo psicodélico modernuqui de MGMT y están llamados a ocupar un hueco en el corazón de los hipsters. A nosotros lo que más nos fascina es la portada del album. No hay vez que la miremos y no descubramos un elemento nuevo. MYSPACE

3R. La Roux. ¿Por qué? Porque... va a telonear a Lily Allen en su próximo gira, porque tiene el suficiente estilo como para que la llamen Diva (ese flequillo!)... Y, sobre todo, porque sólo ha sacado un tema, Quicksand, pero es asquerosamente bueno. Un jitazo en toda regla que váis a escuchar hasta la saciedad. Tiempo al tiempo. MYSPACE

4E. Ebony Bones. ¿Por qué? Porque... es la respuesta británica al fenómeno Santogold. Haciendo gala de un eclecticismo gamberril y barriobajero, tira al sonido más pop que al hip hop afro chungo de Santi, aun así es puro urban for the dancefloor y su look es tan descaradamente fluor y hortera que mola. MYSPACE

5R. Little Boots. ¿Por qué? Porque... en 2008 firmó dos jitazos incontestables (Stuck on repeat y Meddle) y para 2009 amenaza con álbum. Ya ha empezado a recibir premios, es aficionada a los artworks estéticamente brutales... y es una niña preciosa. La suma lleva etampado el sello "ÉXITO" en la frente. MYSPACE

6E. The Sound of Arrows. ¿Por qué? Porque... han sacado un tema, M.A.G.I.C., que lo tiene todo para ser uno de los hits del año: coros angelicales, sintes, palmas y una estética a lo Neverending Story que encantará a los más nostálgicos. Se podría decir que son la respuesta pija al D.A.N.C.E. de Justice, pero para nosotros se acercan más a como serían The Priests si molaran de verdad. MYSPACE

7R. Loney, Dear. ¿Por qué? Porque... en 2007 Les Inrokuptibles lo seleccionar como autor del disco del año (el magnífico Loney, Noir), pero en España pasó sin pena ni gloria. En marzo de este año tendremos su nuevo trabajo, y promete que volverá a acaparar posiciones en listas inteligentes. ¿Será su momento en nuestro país? MYSPACE

8E. Florence and the Machine. ¿Por qué? Porque... porque es capaz de alternar arreglos puramente folk con guitarrazos repentinos y melodías súper potentes sin parecer un clon de Goldfrapp llegada de un after. Sus dos primeros singles Kiss with a fist y Dog days are over prometen un disco heterogéneo pero resultón, a medio camino entre el neo-grunge y el pop para todos los públicos. Además es capaz de mezclar estampados florales con medias de rallas en el mismo estilismo sin despeinarse. MYSPACE

9R. Fever Ray. ¿Por qué? Porque... aún (nos) dura la fiebre de The Knife. Así que cualquier proyecto surgido del seno de los suecos (Fever Ray es el trabajo en solitario de la cantante) no sólo llamará nuestra atención, sino que la acaparará. Y más si sigue la linea lúgubre y repleta de angustia marcada por los autores de Silent Shout. El disco se ha filtrado ya y sólo hace falta una escucha (y un vistazo a su brutal portada) para saber que va a ser uno de los protagonistas del año. MYSPACE

viernes, 30 de enero de 2009

news4girls. Morrissey, desnudo. Y va en serio.


R: Estoy competamente en shock. Muchas han sido las ocasiones en las que desde music4girls he defendido mi fanatismo por el antiguo cantante de The Smiths. También han sido muchas las ocasiones en las que he sostenido que Morrissey tiene mucho más sentido del humor del que pudiera parecer a tenor de las múltiples leyendas urbanas que corren sobre La Diva. La cuestión es que se ha hecho pública la fotografía que irá en el interior de I throw my arms around Paris, el single de presentación de su flamante Years of refusal... Y la imagen es, cuando menos, impactante: el Mozz y su banda totalmente desnudos con vinilos (de 7 pulgadas) tapando sus penes. Que empiecen las bromas (sobre el tamaño del vinilo, evidentemente), pero nadie negará que Morrissey retocándose el tupé, ajeno al cuadro general, está al nivel de hilaridad de aquel Your ARSEnal garabateado en un culo que te encontrabas dentro de su reciente Greatest Hits. ¡Ah! ¿Y no es preocupante que el que tiene mejor cuerpo (dentro de los cánones habituales... sic) sea precisamente el cantante que en breve cumplirá cincuenta años?

discos4girls. Loney, Dear - Dear John


R: El anterior álbum de Loney, Dear, Loney Noir, fue elegido por Les Inrockuptibles (¿la mejor revista musical europea?) como el mejor álbum de 2007. Aquello ya debería haber sido un tirón de orejas a la prensa del viejo continente que había ignorado tanto aquel trabajo como el anterior y más que notable Sologne. Pero, sobre todo, debería haber servido de aperitivo para lo que estaba por venir. Dos años después, Loney, Dear se ha superado: Dear John reúne lo mejor de sus trabajos anteriores (artesanía de un sonido a medio camino entre la hiper balada que fundó Björk hace años y el pop orquestal de Jens Lekman, aunque donde aquel demuestra un gusto exquisito por sablear a The Carpenters y periferia, Loney, Dear hace lo propio con fascinantes samplers electrónicos) y expande horizontes utilizando el fuera de campo musical. Sus nuevas canciones están repletas de sonidos que no deberían estar ahí, que suenan a lo lejos, desenfocados, con el eco del vacío... pero que dotan a las composiciones del dulce regusto de la melancolía (por nuestro pasado, por el pasado del pop) que tanto nos gusta a los adictos a este género tan proclive a las emociones crepusculares. El disco se abre de forma inmejorable: Airport Sorroundings es un subidón de pop espídico con coros finales arrebatadores y peligrosamente pegadizos. Después llega Everything turns to you y entonces sabes que la cosa empieza a ser seria: la melodía se deconstruye en múltiples capas aparentemente disonantes (violines megalómanos, sintes ochenteros, cencerros, coros ñoñi-poperos, palmadas aisladas) en las que es demasiado fácil quedarse enredado. A partir de ahí, suma y sigue. Under a silent sea es para perder la cabeza: la composición se va construyendo delante de tus ojos, sin que te des cuenta, hasta que llega la epifanía final en forma de descarga eléctrica y electrónica. Distant parte de la tristeza (melódica) para acabar en la devastación (emocional). Harm revisa el Adagio en G menor de Tomaso Albinoni en clave vocal y juguetona, Violent certifica que la fanfarria está de moda y Dear John es un dulce cierre que promete que esto no acaba aquí. Que habrá más Loney, Dear. Y que será, si cabe, mejor todavía. Por cierto, ¿he mencionado que Emil Svanängen (alma del proyecto y otro freak que escribo con diéresis en su nombre) es sueco? ¿Todavía no os ha quedado claro que este va a ser el año de Suecia?

E: Sea o no este el año de Suecia (que todos los años parece que lo van a ser y lugo resulta que no), lo que sí es cierto es que los suecos hace años que no solo exportan carne suculenta (masculina y femenina, ya me entendeis) sino música excepcional. Mientras el foco de interés al otro lado del Oceáno se ha desplazado ultimamente a Canada (ya se han resarcido por completo de lo de Brian Adams y Celine Dion), sí que es verdad que en el Viejo Continente deberíamos ir prestando más atención al norte, de donde cada día nos llegan cosas más interesantes. Este disco no tiene la capacidad de arrebato de Animal Collective ni el sello irreprochable de Antony, no será un bombazo como la próxima entrega de Pj Harvey, ni cambiará nada en la historia de la música en general. Y sin embargo es un disco que provoca algo en el que lo escucha. Unas veces placidez, otras desolación (I Got Lost está llamada a ser una de las baladas tremendérrimas del año) y a ratos una curiosa necesidad de balancearse al son de su ritmo. Está compuesto de nanas folk y odas electrónicas, a ratos excesivas (Everything Turns to You) y a ratos comedidas hasta la desnudez más absoluta. Bañado a su vez de una fina capa de suavidad y dulzura envolvente que lo convierten en algo adictivo. Desde su inicio con Airport Surrondings hasta su final, Dear John es un agradable viaje por una serie de canciones perfectamente estructuradas donde cada acorde tiene su razón de ser y cada letra adquiere sentido. Una discreta obra de orfebrería pop que tiene tanto de tradicionalista como de moderna, una paradoja curiosa pero inevitable teniendo en cuenta que por sus melodias una reconoce a los mejores The Postal Service, lo más brillante de Death Cab for Cutie e incluso lo más emotivo de Iron&Wine, todo hilvanado con un sonido a su vez coherente y original. Así, cuando uno le da al play para escucharlo sabe que lo hace para evadirse de la forma más agradable (y sana) posible. Mientras suenan I Was Only Going Out, Under a Silent Sea o Summers no es tanto que uno se olvide de lo mundano, pero mientras resuenan sus acordes y sus capas y capas de arreglos orquestales y sintetizados, una solo puede permitirse el dejarse llevar por el vaivén entre el optimismo y la tristeza que impregnan cada minuto de este disco. No es que Loney, Dear sea esquizofrénico ni nada parecido. Es simplemente un autor hábil en provocar emociones y es el artífice de uno de los discos más ensoñadores del momento. Y en el sí que se cumple lo de que más es más y no lo que pregonan Fangoria.

jueves, 29 de enero de 2009

news4girls. Pelea de gatas para Eurovisión: Melody se zampa a Poyeya


R: Hace unos meses ya os informamos al respecto: Melody's back, bitches! ¡Y de qué forma! No tuvo suficiente con marcarse un videoclip en un escenario de Los Morancos ambientado en La Alhambra donde la antigua niña de los gorilas descubría al mundo que se había implantado una cadera de Barbie para poder imitar el movimiento de pelvis de Shakira (y acabar, como la otra, en un taca-taca de aquí a cinco años con la cadera dislocada)... Entonces no sabíamos cuál iba a ser su siguiente (y terrible) movimiento: ¡presentarse a Eurovisión! Pero para semejante empresa, la niña que prefiere a El Fary antes que a Radiohead sabe que tener a alguien detrás bailando le da un plus a la cosa. Lo probó con Los Lunnis, pero no quedaba bien. Incluso lo probó con las hormigas de El Hormiguero implantadas en sus nalgas. Pero no había forma. Así que se acordó de los gorilas aquellos y, como Rafa Méndez estaba haciendo Fama, decidió recurrir a lo que tenía cerca y pilló a Los Vivancos. Estela se sorprendió de que yo supiera quiénes son Los Vivancos... Pero a cualquiera que viera la edición anterior de Fama seguro que le suenan: son una familia trashumante (seamos políticamente correctos) de 74 maromos y medio (pero sin cabra ni organillo) que zapatean y bailan y van sin camiseta y tienen el pelo largo, rizado y mojado. Todos. El video con el que se presentan a Eurovisión no tiene precio, destacando un estribillo inteligentísimo que deja en bragas la rima bequeriana (quiero ser tu boca en esta noche loca... de amor) y unos setecientos cambios de vestuario en el que Melody pone a prueba la capacidad de nuestras pupilas para no estallar ante los pantalones de papel albal y los vestidos a-la-sueca con estampados andaluces. ¿Alguien duda de que nos van a representar? La cosa está entre ella y Poyeya. Pero sólo hace falta ver la intro del video (que, por cierto, la canción se llama Amante de la luna) para saber que Melody ES España. ¿Ya habéis votado?


lunes, 26 de enero de 2009

omg4girls. Sorry, I missed your party (es una fiefhtaa)


E: Si hay algo que a music4girls nos gusta más que la música en general y Britney Spears en particular, es salir de fiefhta. Y en consecuencia hacer todas las cosas que uno hace cuando está de fiefhta. Hacer el indígena, bailar, beber chupitos de Martini y hacernos fotos en plen apogeo de nocturnidad (y festividad) para días después amenazarnos entre nosotros con hacerlas públicas en Facebook. Y es que hay cosas que como decía el bueno de Jung, son comunes para (casi) todos los seres humanos. Así, el viernes y el sábado son días de descontrol, el domingo es día de resaca, y el lunes de arrepentimiento. Pero una cosa es chincharte entre colegas y reirte a costa de ellos, y otra es que a alguna mente retorcida se le haya ocurrido la maravillosa idea de "robar" fotos de fiefhtas ajenas y colgarlas en un blog con el hilarante comentario de pie de turno. Huelga decir que a nosotros esta iniciativa nos encanta. Así que cuando Ana Serrano, aka Patata, que también nos ha acompañado a alguna fiefhta ultimamente, nos pasó el link de Sorry, I missed your party no pudimos evitar hacernos fans. No es solo que la moderadora del blog fusile Flickrs ajenos, es que la gente ya le pasa fotos de sus propias bacanales para el choteo público. Y en ellas hay de todo, alcohol, caras dislocadas, vomitonas y, sobretodo, muy poco sentido del rídiculo. Y como bien me dijo Ana hace un rato, planea el temor sobre nuestras cabezas: ¿saldremos algun día nosotros?


R: (Estoy en shock... Hace veinte minutos que miro fotos en el sitio este y no se me ocurre nada inteligente que decir al respecto, sólo quiero seguir mirando y mirando y mirando. ¿Elimina este blog la inteligencia humana¿ ¿Y a quién le importa? Ya lo he puesto en Mis Favoritos al lado de OXTE)


viernes, 23 de enero de 2009

discos4girls. Franz Ferdinand - Tonight


R: ¿Te acuerdas de los libros de Elige tu propia aventura? Pues bien, ante el nuevo disco de Franz Ferdinand se abren varios caminos. 1. Si te gustó el debut de los escoceses pero su segundo álbum te parece una medianía, sigue leyendo este artículo (porque el que escribe es de tu parecer). 2. Si te gustó el debut de los escoceses y el segundo disco te parece genial, eres un fan y seguro que cualquier tipo de reseña del disco te la trae al pairo, así que no leas nada y sigue escuchando Tonight. 3. Si no te gustaron ni el primer ni el segundo disco de Franz Ferdinand será que no te gusta el buen pop, así que busca en Google blogs sobre hard-core metal o el género que más te apetezca. 4. Si no sabes quiénes son Franz Ferdinand... ¿¡qué coño haces en music4girls!? Suponiendo que después de todas estas posibilidades siguas leyendo este post, he de admitir algo: hace tres meses, si me hubieran dado a elegir entre un plato de coles de bruselas o escuchar el tercer disco de Franz Ferdinand, me habría ido a la cocina a por aceite y vinagre (de Módena) para ir preparando las verduritas. Pero entonces llegó Ulysses y lo cambió todo: un jitazo equiparable a Take me out pero que, ¡sorpresa!, no intentaba imitar el sonido de la canción que les hizo saltar a la fama y que, sobre todo, exploraba nuevos caminos en los que la rotundidad habitual de los escoceses se veía reforzada por el descubrimiento de nuevos sonidos ¿electrónicos? ¡Nah! Más bien pertenecientes a esa casta de rockeros que exploran las estructuras de las canciones de baile. De esta forma, Ulysses presagiaba un álbum en el que Franz Ferdinand exploraran esa interesante senda. Pues bien, Tonight no explora esa senda... Pero, aun así, es un disco más que digno. En mi caso, que les perdí completamente el interés con su templado segundo álbum, me he descubierto enganchado a canciones tan clásicas como No you girls, What she came for o Bite Hard (la más Franz Ferdinand del lote), que bien podrían haber sido la continuación que muchos esperábamos a su debut. Aun así, lo cierto es que algunas composiciones sí que sorprenden por su originalidad (al menos, en la trayectoria del grupo): en Twlight omens se desliza un sinte retrofuturista delicioso, Live Alone se ve animada por una base electro-popera tremendamente pegadiza, Can't stop feeling sorprende con un zumbido eléctrico cercano a la sal gorda coreable en carpas veraniegas y Lucid dreams... Bueno, Lucid dreams es Lucid dreams, con ese closure espectacular que bien se podría pinchar en Space Ibiza. En conclusión, se podría decir que el nuevo disco de Franz Ferdinand no es un discazo absoluto. Pero, señoras y señores, después del anterior descalabro, Tonight es capaz de hacer recuperar la esperanzas a oyentes como yo. Que no es poco.

E: Pues a mí no me gustan ni el primer ni el segundo album de Franz Ferdinand y considero que sí me gusta el buen pop. O como mínimo el pop que entretenga. Porque si una cosa tienen estos es que de aburridos lo son un rato. Aburridos y repetetivos. Pero cuando Raül, que había perdido del todo la fe en ellos como bien dice, me medio obligó de forma entusiasta a escuchar el resurgir de esta banda, me bajé de mi burro y lo hice. Más que nada porque ya había oído Ulysses y sí que parecía que estaban dispuestos a explorar nuevas vías estilísticas, porque el single es un Jit con mayúsculas. Así que le doy al play a Tonight y sí, suena Ulysses y es guay. Y suena Turn it On y pinta bien, dos minutos de canción y me viene a la mente que me he quedado sin Fairy en casa y que tendría que pasarme por el súper. Empieza la tercera canción y también empieza bien, "uy, esto sí que es diferente", pero al escaso minuto recuerdo que tampoco tengo Dixán y que ya que me paso por el Bonpreu, aprovecharé que el suavizante está también bajo mínimos. Cuarta canción, Send Him Away. Guay! empieza súper potente, seguro que esta sí que me va a sorprender. Gorgoritos de Alex Kappranos, guitarrazos y golpes de batería... bueno, original tampoco es. Y mientras pienso esto repaso mentalmente los estantes de mi nevera. Me he quedado sin espinacas y me apetece comprar tomates cherrys. Y sin darme cuenta ya estoy en la puerta del super, han sonado como ocho canciones del nuevo y fantabuloso y originalísimo y súper diferente disco de Franz Ferdinand y sin embargo, cada vez que Alex llega a un estribillo, el que sea, sin querer me sale Take me Out...ah no, que no era esta. Pues nada. Yo a lo mío.

jueves, 22 de enero de 2009

news4girls. ¡La Duquesa de Alba nominada a un Oscar!

R: Como cada año por estas fechas (y para que veáis que no sólo de música y de celebrities clicheteras vivimos en music4girls), los Oscar ponen a prueba nuestra capacidad para soportar el aburrimiento de su previsibles y poco arriesgadas nominaciones. La gala ya no nos pone a prueba nada, porque queda lejos de nuestra intenciones tragarnos 35 horas, 54 minutos y 22 segundos de tostonazo absoluto (no me lo planteo ni después de ponerme un poco palote al saber que se ha acabado la stand-up comedy y que Hugh Jackman recuperará la tradicón teatral-musical de las galas de hace... siglos). Pero a lo que vamos, que ya se ha hecho oficial lo que todo el mundo sabía (y por lo que en music4girls poníamos velitas a Santa Choni para que no ocurriera): la Pe está nominada a Mejor Actriz Secundaria por su ¿trabajo? (¿desde cuando se considera trabajo hacer de tí misma?) en Vicky Cristina Barcelona. Pero está claro que la organización ya limpió su conciencia al otorgar el galardón el año pasado al Tercer Mundo (sí, Javier Bardem), así que este año será más normal que gane alguna de las otras cuatro nominadas: Amy Adams (Doubt), Viola Davis (Doubt), Taraji P. Henson (Benjamin Button) o Marisa Tomei (The Wrestler)... Pero que Tomei no se haga ilusiones, que este año no hay ningún borracho repartiendo premios y sería raro que le callera a ella en gracia.
La sorpresa de las nominaciones, sin embargo, ha sido ver la sección de Mejor Actor: Richard Jenkins (The Visitor), Frank Langella (Frost / Nixon), Sean Penn (Milk), Brad Pitt (Benjamin Button) y... ¡la Duquesa de Alba! Ah, no... que es Mickey Rourke. Esperemos que el Oscar se lo quede él, así vende la estatua y puede seguir operándose en Marbella. Algo que no ha sorprendido a nadie es ver a Heath Ledger (Batman: El caballero oscuro) entre los nominados a Mejor Actor de Reparto. Y como todos sabemos que le van a premiar, no es ni necesario hablar del resto. Lo que sí que tengo que comentar es que en music4girls estamos contentos de volver a ver a Meryl Streep entre las nominados a Mejor Actriz. Sabemos que no se lo va a llevar, pero ahí está la gracia (ahí y en que el único Oscar que finalmente se lleve la Streep será por las caras que pone cuando, año tras año, pierde la estatua). Las verdaderas nominadas son: Anne Hathaway (La boda de Rachel), Angelina Jolie (El intercambio), Melissa Leo (Frozen River) y Kate Winslet (Revolutionary Road).
Entre los premios grandes, está cantado que Wall-e hará morder el polvo a Bolt y a Kung-Fu Panda (que la han metido porque algo tenían que meter... supongo) en la categoría de Mejor Film de Animación. Tampoco han habido sorpresas (y menos después de los Globos de Oro) en la categoría de Mejor Película: El curioso caso de Benjamin Button, Frost / Nixon, Milk, The Reader y Slumdog Millionaire. Para seguir en la tónica de aburrimiento generalizado, la categoría de Mejor Director está engrosada por los autores de los trabajos que concursan en Mejor Película: David Fincher, Ron Howard, Stephen Daldry, Gus Van Sant y Danny Boyle. Ante semejante falta de riesgo, ¿a alguien le quedan ganas para hacer quinielas?

dignidad4girls. Fangoria - lo menos de lo menos

E: Vaya por delante que music4girls hemos sido fans de Olvido& cia desde que tenemos uso de razón. Como el setenta por ciento de nuestra generación, así a bote pronto. Nos hemos tragado sin masticar todas sus reinvenciones, cambios, proyecciones y demás, y lo hemos hecho siempre con gusto. Desde la revolución new-wave de sus inicios, pasando sobretodo por su resurgir con la electrónica poética de Una temporada en el infierno, hasta el rollo erótico festivo de El Extraño Viaje. Pero ha llegado el momento de decir nevermore, bye, bye, vuestro tiempo ya pasó. Con Mas es mas, Fangoria presentan su nuevo album, Absolutamente. Y si la cosa no va por otros derroteros, podemos decir que a estas alturas Fangoria se han convertido en lo menos de lo menos.
Vuelven al negro (que nunca debieron abandonar) en una especie de regreso a sus orígenes, pero siguen anclados en la electrónica de horganillo. En la canción hay "uas, uas" y "aaahs" y violines sintetizados y palmas y poca cosa más. Dura casi cuatro minutos pero parece una vida entera. La letra es eterna, hablada, y como viene siendo un clásico en los últimos tiempos, de fondo muy trascendente y de crítica social (quiero flamencos rosas/ y otras cosas /que no sirven para nada), hablan de excesos, de vanidad y de envidias varias. Muy en su línea de los últimos...cinco años.En el vídeo Alaska baila, o como siempre, lo intenta, acompañada de dos emos muy bien peinados, que como buenos emos que son, tienen actitud de querer estar en otro sitio. Eso sí, ella luce divina con su vestido de vinilo. La estética es blanco y negro y Nacho sale de vez en cuando haciendo como que graba, para jugar con el rollo del negativo y positivo de una filmación. Muy cool y muy original todo. Habra que esperar a escuchar el disco entero, pero los que creíamos que no podían hacer una canción peor que Criticar por criticar (Estés donde estés...ya podrían aprender de Morrissey para titular las canciones), estábamos equivocados. Yo sólo espero que cuando Nacho le diga próximamente "Alaska, Alaska, te he escrito una canción" se lo piense dos veces porque esto ni es canción ni es nada. Fangoria, dignidá.

martes, 20 de enero de 2009

discos4girls. Morrissey - Years of refusal


R: Years of Refusal llega una temporada después de que cierta parte de la crítica musical se echara las manos a la cabeza debido a la falta de interés general ante la revisitación del Scott Walker más melodramático (y popero-orquestal) que The Last Shadow Puppets llevaban a cabo en su debut homónimo. Esa misma parte de la crítica musical y, muy seguramente también el resto, serán los que lapidarán el nuevo trabajo de Morrissey por excesivo en su teatralidad y por megalomanía en sus arreglos. Incluso por hiperactividad en sus ritmos e ínfulas de opereta en su abordaje del trabajo vocal. Pero, señoras y señores, ¿no es esto lo mismo que intentaron hacer The Last Shadow Puppets pero a lo grande? ¿No es esta la evolución lógica del sonido que todo el mundo alabó en You are the quarry y que todo el mundo criticó que Mozz abandonara en Ringleader of the tormentors? La cuestión es que esa "continuidad" con el disco que hizo que habláramos de un come-back en toda regla de Morrissey está más que justificada: mientras que Ringleader of the Tormentors se vio lastrado por la sobreproducción de Tony Visconti, en Years of Refusal es Jerry Finn (fallecido trágicamente poco después de poner el punto y final al disco) el que vuelve a tomar la batuta. ¡Y de qué forma! Vuelven las guitarras espídicas que se aceleran hacia un cielo en el que pop y rock se tocan bañados por azúcar quemada; vuelve la batería omnipresente com esqueleto de cemento; vuelve el gusto por la orquestación, a las que se incorporan unas trompetas deliciosas cercanas al sentir fronterizo de Calexico; y, sobre todo, vuelve Morrissey como uno de los pocos cantantes actuales que sabe que para afrontar composiciones como las suyas, no basta con cantar. Hay que interpretar. Y de eso Mozz va sobrado en temazos incontestables como el maravilloso One day goodbye will be farewell (con esa guitarra que, literalmente, arranca y se dirige hacia un horizonte de power-pop bailable hasta decir basta), When I last spoke to Carol (pop que remite a The Smiths sin amargura, poniendo mayúsculas donde aquellos practicaban minúsculas), Black Cloud, I'm OK by myself o las ya escuchadas (en su Greatest Hits) pero siempre bienvenidas That's how people grow up y All you need is me. El único resbalón es, precisamente, I'm throwing my arms around Paris, descafeinada y desenfocada. Así que, ¿alguien entiende por qué la han escogido como primer single? ¡Que me lo expliquen!

E: Ha hablado Raül como fanfatal total de Morrissey, que quieras que no, hace que pueda desmerecer un poco (solo un poquito) su crítica. Y eso que me sorprende sobremanera que califique I´m throwing my arms bla, bla (joder qué títulos) de descafeinada y desenfocada... porque a mí me gusta. Y no sólo me gusta su primer single, sino que me gusta el disco entero. Y digamos que no tengo nada en contra de Morrissey, basicamente me cae mal. Y por lo general mi interés en lo que haga es mínimo. Reconozco que en su día le encontré el gustillo a You are the Quarry y que Ringleader of the Tormentors me parece eso, un tormentor. Así que como no fan de Mozz puedo decir que Years of Refusal no está mal. Bueno, qué narices. Está muy bien. Yo no entiendo tanto de las operetas y las desmesuras del ex Smiths, pero cualquiera que esté un poco metido en el tema sabe que Morrissey es como este disco en sí mismo: desmedido, exagerado, megalómano, barroco y cargante (en el mejor y en el peor sentido de la palabra). O entras en su juego o te quedas fuera. En una primera escucha yo me quedé atrapada con Black Cloud, y en general en el disco con la introducción de arreglos guitarreros en plan hard-rock clásico. Me fascinó el regreso a los orígenes de sus temas en The Smiths con All You Need Is Me, está muy bien que siga alimentando la nostalgia de a los que nos gustaban sus discos. Y sobretodo me quedé alucinada literalmente con When Last I Spoke to Carol, con sus trompetas, su guitarra española y su toque enfermizamente fuera de onda y hortera, como un tema descartado de la b.s.o de la segunda entrega de Kill Bill 2. Es adictiva, es épica, es exagerada, es la típica canción que todo el mundo pondrá a parir pero que siempre cantará haciendo aspavientos en la intimidad. Por lo demás, el disco es Morrissey en estado puro, para bien o para mal, y como su propio autor provocará posturas encontradas, pocas veces neutrales. Teniendo en cuenta que el propio Morrissey es el que incentiva esas actitudes con su comportamiento y en sus seguidores, solo puedo calificar el disco de éxito absoluto.

lunes, 19 de enero de 2009

versus4girls. Rocknrolla


¿Por qué le gustó a Estela pero no le fascinó?
1. Porque Guy Ritchie vuelve, afortunadamente, a los derroteros narrativos que lo hicieron uno de los directores más notables de películas de acción. Pero su principal virtud, es al mismo tiempo, su mayor defecto. En Rocknrolla, Ritchie repite todos los tics, vueltas de tuerca, giros argumentales y desarrollo (algo disfuncional) de personajes que ya instaurara en (la increíble) Lock&Stock y en menor medida en Snatch. Una, viendo esta película, tiene una marcada sensación de deja vu, con el inconveniente de que no es tan placentera como cuando visualiza las dos primeras películas del director. Porque en su última película ha perdido parte de su notable frescura, queriendo darle al resultado final un empaque de seriedad ocssional que no parece convencerle ni a él mismo.
2. Porque en Rocknrolla, Ritchie se pierde en parte de su planteamiento, se pierde en sus propias bromas y sobretodo, se pierde a la hora de estructurar la narración en torno a un macguffin al que le quiere dar más importancia de la que realmente tiene. Nos están dando la brasa durante toda la película con un personaje que se presenta brillantemente pero que pierde fuelle cuanto más aparece en escena, hasta el punto de convertirse en algo paródico hacia el final del metraje, cuando adquiere más protagonismo. Por otro lado, los personajes de esta película, salvo "Bob el Guapo" (que sí destaca por muchos motivos) , no son ninguna aportación al universo Ritchie. Sí, hay matones, hay yonquis y gángsters y una Mata Hari, pero de nuevo persiste la sensación de estar viendo personajes que ya has visto o que no acaban de estar tan bien desarrollados como podrían.
3. Porque la resolución de la trama es tan fácil y repentina que parece mentira. De nuevo volviendo a las habilidades de las que hizo gala en Lock&Stock, sorprende como un maestro como Ritchie para liar madejas argumentales y desliarlas sin que apenas el espectador se percate, resuelva la trama principal en escasos diez minutos de la manera más obvia, con un happy ending de lo más novelesco y facilón. Esto no hace desmerecer el buen rato que una ha pasado viendo la película, que conste, pero la única conclusión que puedo extraer es que Rocknrolla sería una película de 10 si no existieran sus precedentes.


¿Por qué le flipa sin reservas a Raül?
1. Porque Guy Richie vuelve a hacer lo mismo de siempre, sí. Pero tal y como dije cuando comenté esta misma película después de disfrutarla en el Festival de Sitges: ¡bienvenida sea la reiteración! Woody Allen siempre hace lo mismo y no le importa a la gente. Lo mismo con Miyazaki, Lynch y muchos otros "autores" en los que la repetición es considerada un refuerzo del concepto de "autoría". Teniendo en cuenta que estamos en plena reformulación de ese mismo concepto por vía de la musculación de la forma y el raquitismo de la narratividad... ¿Por qué decir que la vuelta de Ritchie a derroteros conocidos no es positiva? ¡Es pura autoría!
2. Porque afirmar lo ya dicho en el punto anterior implica pecar de injusticia: lo de Rocknrolla no es repetición. Es refinamiento. Los presupuestos habituales del cine de Ritchie se refinan tanto en forma como en fondo. En la superficie, el film de Ritchie es un potentísimo tanque de última factura: lo que en sus anteriores films estaba resuelto con más ganas que medios (y si no me creéis, revisad Snatch y veréis qué mal ha envejecido su montaje), en Rocknrolla es pura adrenalina visual. Pero que nadie se confunda: no es hooliganismo visual. El director ha conseguido dotar a sus antiguas tramas de un plus de elegancia realmente sorprendente.
3. Porque en continuación al punto (2), también hay un refinamiento del fondo. Puede que, a primera vista, parezca que la trama vuelve a ser un batiburrillo en el que cabe cualquier trapicheo de los altos y bajos fondos londinenses... pero, ¡ojo! Porque Ritchie intenta ir algo más allá y se lanza al abordaje de nuevos temas como la sublimación de la femme fatale, la línea que separa camadería leal de la amistad sincera (con el personaje de Archie) y, sobre todo, de la autodestrucción como medio de vida. Vamos: la enfermedad de las celebrities. Puede que los personajes no tengan la profundidad de otros films, pero es que la trama no requiere más profundidad. Así que, ¿alguien puede seguir diciendo que a Ritchie le falta fondo?

viernes, 16 de enero de 2009

discos4girls. Antony & The Johnsons - The Crying Light


R: Justo antes de que se filtrara The Crying Light, algo después de comprarnos el EP Another World, Estela y yo contrastábamos nuestras esperanzas respecto al nuevo disco de Antony & The Johnsons. Ella decía que esperaba que la cosa tirara por Shake that dog, aquella canción cruda y jazzística que incluso se filtró entre lo mejor del año en Pitchfork. Yo, sin embargo, afirmaba lo que sigo sosteniendo a día de hoy: hace tanto que no tengo ración de Antony (en su propio proyecto, nada de colaboraciones estelares), que más de lo mismo no sólo me parecería bien... me parecería absolutamente genial. Y eso es lo que hemos tenido al final. Más o menos. Cuando le das al play a The Crying Light, Her eyes are underneath the ground florece ante tus ojos como una composición delicada, atemperada, con una angustia expresada a través del minimalismo (musical) allá donde en sus anteriores discos optaba por la explosiva megalomanía instrumental. Epilepsy is dancing vuelve por los derroteros de I'm a bird now, o eso quieres pensar cuando llegas al doloroso estribillo. Pero si escuchas atentamente, con los ojos cerrados, en todo el álbum advertirás que, desde el principio, Antony está optando por la mínima expresión del dolor: nada de fanfarrias ni instrumentaciones grandilocuentes. Aquí el dolor se presenta desnudo, esquelético, raquítico, en su mínima expresión. Pero es esa mínima expresión la que lo convierte en algo mucho más magnificado que en sus anteriores trabajos: el silencio es el mejor amplificador para los sentimientos oscuros. Antony lo acaba de descubrir y así lo explota en canciones excepcionales como las mencionadas o Kiss my name (con el violín de comedia musical francesa más delicioso de los últimos tiempos), Another world (que ya anunciaba intenciones en el EP) y Daylight and the sun (en un sube y baja con una percusión que ataca directamente a tu conciencia). En definitiva, puede que The Crying Light no sea la revolución que todo el mundo estaba esperando: un buen puñado de torch songs dispuestas a inflamar el corazón de las drama queens adictos a pelucones y maquillaje. Más bien lo contrario. En esta ocasión, Antony nos da una bofetada sorda que nos invita a guardar silencio y escuchar sin prejuicios, dispuestos a disfrutar de la desnudez de su nuevo viejo sonido.

E: Y tal y como le dije a Raül una vez escuchado el disco, poco me importa que finalmente Antony no haya cambiado su rumbo y siga anclado en la melodía triste y nostálgica. Porque es único exponiendo sentimientos desgarradores y a su vez es necesario que siga componiendo como lo ha hecho hasta ahora. Eso sí, lejos de seguir explotando los arreglos de cuerda de cabaret melancólico, en The Crying Light asumen casi la misma importancia que su omnipresente piano los arreglos de viento, algo que no encontrábamos en sus otras entregas. Lo que, tal y como dice Raül, le da al conjunto un acabado de desnudez absoluta. Así que después del subidón Animal Collective, Antony de nuevo impone la tristeza de su voz y de su universo, como ya cantaba la Rosenvinge en su día, "la desazón se va a llevar en esta temporada". Bienvenida sea.

jueves, 15 de enero de 2009

agenda4girls. iPod Battle: music4girls VS The Motherfuckers en el Mond Bar


E: ¡Atención! En una esquina del ring con camisas oversized y calzones con estampado tartán: los defensores del hype justificado, los fans irredentos de Britney y agitadores del universo blog: ¡¡music4girls!! En la otra esquina, con estilo clásico y elegante y calzones de Star Wars y Arale: los siempre efectivos adalides de los sonidos tradicionales, los buscadores de tesoros escondidos en las cajas del pasado siglo, los cazadores de mitos contemporáneos: ¡¡The Motherfuckers!! Esta noche protagonizarán la mayor batalla de iPods en la historia de la noche barcelonesa. La cita será en el Mond Bar de Gracia, de nueve a una de la madrugada. Cuatro horas de lucha intensa en la que se intercambiaran hits de apabullante potencia y clásicos que dejaran a la audiencia boquiabierta. Si tienes el corazón valiente y te gustan las experiencias fuertes, no puedes faltar a la cita de esta noche. Los reporteros de Está Pasando ya están invitados.

R: ¿Qué vamos a pinchar? Somos transparentes, ya nos conocéis. Pincharemos todos esos grupos de los que solemos hablar en este nuestro blog. Sólo tenéis que mirar nuestra novísima lista de lo mejor de enero para haceros una idea. ¿Qué van a pinchar The Motherfuckers? También son transparentes. Pincharán todos esos grupos de los que, desde agosto del año pasado, hablan en el blog de Marc (aquí). ¡Os esperamos!

agenda4girls. Albaialeix en La [2]





R: Albaialeix son Alba Basi y Aleix Clavera. Pero hay un tercer nombre sin el cuál sería imposible entender a esta banda catalana: Pablo Díaz- Reixa. El omnipresente El Guincho, prendado del dúo desde el principio, les produjo gran parte de su debut homónimo en una iglesia de Camprodón. Pero ya hace un tiempo que salió el disco y, sobre todo, hace un tiempo que vienen haciendo ruido en cada nueva actuación. Así que su concierto de mañana viernes 16 de enero en La [2] de la Apolo (a partir de las 12:30 de la noche, en compañía de Homenatges, DJ Coco y Mether & Zacker) es una oportunidad excelente para que, de una vez, puedas comprobar por qué arma tanto revuelo este dúo que le ha girado las costuras al psych-folk partiendo de lo que tiene delante: la música de su propia tierra

miércoles, 14 de enero de 2009

listas4girls. ENERO



R: A principio de enero hemos hecho tantas listas que casi, casi... casi no nos quedaban ganas de hacer la lista de las canciones del mes. Pero como unos días de desintoxicación son suficientes para devolvernos las fuerzas (y esperad!! que queda la lista más jugosa del 2008), no sólo os ponemos ya la lista de enero... sino que la hemos renovado ¡casi por completo! Los únicos que se quedan son Passion Pit. ¿Hemos dicho ya que os vamos a dar mucho el coñazo con ellos en 2009? Entran derechos al número 1 Animal Collective: ¿es My Girls el primer gran temazo del año? Sin duda. Pero hemos tenido dificultades a la hora de seleccionarlo entre la colección de jits redondos de Merriweather Post Pavillion. Algo similar a lo que pasa con Antony & The Johnsons y con Morrissey: ambos tienen nuevos trabajos que no sorprenderán a nadie. ¿Más de lo mismo? Si así quieres verlo, nadie te quitará la idea de la cabeza. Pero The Crying Light y Years of Refusal son dos discazos con temas para dar y vender, cada uno en lo suyo: Antony en su exploración de las miserias que habitan las cavernas oscuras de nuestra consciencia y Morrissey totalmente embargado por su megalomanía épica de guitarras encabalgadas y ritmos trotones. De Esau Mwamwaya & Radioclit ya os hablamos en la lista de los mejores discos de 2008, así que no me repetiré. Sólo decir que Wena es mierda de la güena: bailable, sudorosa, directa al cerebro como un pelotazo de M. Por último, advertir que pongáis un ojo sobre La Roux. ¿Primer hype del 2009? Sea como sea, Quicksand escupe en las mejillas de las mejores divas con una base pegadiza que se te quedará en los huesos. Como el reuma de enero.

E: Y si 2008 fue el año del resurgir de Britney, 2009 será el de Lily Allen. Después de abandonar alcohólicos anónimos y saltar a la palestra poniendo a la petarda de Katy Perry (que tuvo los bemoles de decir que ella era la Lilly Allen americana... pero en delgado), Lily volverá a demostrar que no hay Juani que la supere, ni en actitud ni en estilo. Y eso que ha abandonado el look tecnoyoli para volverse refinada y en el single adelanto de su próximo disco, The Fear, se muestra como una curiosa mezcla entre Maria Antonieta y maniquí de escaparate de H&M. Ella se muestra más apocada, pero como ya hizo anteriormente, vuelve a firmar una canción pegadiza a más no poder. Además seguimos en nuestras reivindicaciones del pop nacional. Por eso hemos cambiado Mengele y el amor por Nunca estás a la altura, la canción más shoegaze y destacable de Tu hoguera está ardiendo de Klaus&Kinski. No queremos dejar atrás tampoco el Supercrepus de Joe Crepúsculo. Muchas son las canciones de su disco, pero de todas ellas, La canción de tu vida es la que más intenciones esconde de ser un hit. Fue el Disfraz de Tigre tardío de 2008 y en 2009 todavía nos encantan sus bases chunda chunda y su estribillo. Y en la línea de pop lo-fi escueto y directo, tenemos a Centella, ex Sybil- Vane que presenta su proyecto en solitario. Centella es ella (ella, ella), su guitarra (los arreglos adicionales son mínimos) y su capacidad para escribir letras que bailan entre la ingenuidad y el surrealismo pero con tanto arte y tanta simpatía que te dejan una sonrisa en la cara lo poco que duran.

martes, 13 de enero de 2009

discos4girls. Animal Collective - Merriweather Post Pavillion. O repetid conmigo: "Lion in a coma, lion in a coma..."



E: Cualquier diseñador gráfico tendría que tener claros los riesgos que supone combinar lila con verde, que por lo general se dan de hostias. Pero cuando se filtró la portada del que iba a ser el noveno disco de Animal Collective, nadie se fijó en si los colores pegaban o no. Lo que más llamaba la atención era su diseño psicodélico e hipnotizante. Los niños mimados de la crítica más cool apostaban fuerte escogiendo para la portada una imagen que juega con las vista y "que se mueve", como los posters aquellos tan noventas que escondían un dibujo dentro de una imagen inconexa y que te obligaban a pegar la nariz en el papel con el objetivo de verlo. Afortunadamente, una no tiene aquella sensación de parecer gilipollas como antaño mirando esto. Y es que nunca la portada de un disco dejaba tan claro cuáles eran las intenciones de su contenido. Lo que Animal Collective querían era que uno al mirar esa imagen se quedara, básicamente pillado. Atrapado en las ondeantes figuras y sin ánimo de escapar a la atracción del dibujo. Y ahora que hemos escuchado Merriweather Post Pavillion, descubrimos que nos pasa lo mismo en cuanto nos ponemos su primera pista...

R: Una cosita antes de lanzarme al ruedo: de hecho, la primera vez que vi la portada de Merriweather Post Pavillion, ¡estaba totalmente convencido de que era un gif animado! Eso sí, que conste que soy tan poco fan de Animal Collective que ni una portada tan resultona consiguió levantar mi interés por escuchar el álbum en cuanto se filtro. Craso error... Hace una semana que lo escucho a piñón. Sin tregua. Dejando de lado otros discos que, a priori, deberían tenerme más enganchado. Dejad que os describa la primera vez que escuché este disco. Pongo la primera canción, In the flowers, y todo me suena tan Animal Collective, tan a gusto acurrucados en su maraña de sonidos experimentales, que me provoca un pinchazo de disgusto. Pero, ¡coño! ¿¡qué es esa fanfarria que sobrevuela el horizonte hasta mi cabeza!? ¿¡No es, de verdad, ese pop orquestal-experimental que la banda siempre ha cacareado pero que nunca han sido capaces de lanzar al público no animalcollectivero mediante amarres, sogas, guías que les oriente!? Después llega My Girls, lo que sería un jitazo incontestable si viviéramos en un mundo en el que te enseñaran música en la escuela. Su estribillo (¡tiene estribillo! ¡y es maravilloso!) se te clava en el pecho como un broche de punta afilada: doloroso, pero infinitamente bello. De ahí hasta el final (destacando Lion in a coma y Brothersport), perdido en una maraña de melodías que se expanden y se contraen, de referencias africanas y étnicas que dejan en pañales al moderneo más recalcitrante... me doy cuenta de que, por fin, Animal Collective han conseguido exponer ordenada y seductoramente las conclusiones de toda la experimentación que han practicado en sus álbums anteriores (incluyendo la excelente aventura en solitario de Panda Bear). Decían que Strawberry Jam era su disco más accesible. Mentira. Su disco más accesible es Merriweather Post Pavillion. Accesible... y disfrutable.


E: Quizá debería haber empezado el post pronuciando también mi antipatía al fenómeno Animal Collective. No espereis otra cosa. En el anterior Primavera Sound ya os dijimos que abandonamos su directo para irnos a la pista zapatilla par ver a Kavinsky. Y lo que me empujó a escuchar Merriweather... fue básicamente la curiosidad. Un "joder, a ver qué pasa con esta gente que está todo dios dando la brasa con el disco". Es decir, lo que no había hecho hasta el momento con ningún otro. Y me fascinan más, cuanto más los escucho. El disco es como un curiosa droga que uno rechaza desde un principio y al que le facilitan la primera dosis gratis. Y para desgracia propia, y como en los peores casos, cuando la pruebas no hay marcha atrás, y acabas como Raül, teniéndolo en plan repeat en tu equipo y en tu cabeza. Es cierto que In the Flowers suena muy Animal Collective, si lo comparas con los sonidos asentados en Strawberry jam. Es un inicio efectista y efectivo. Como lo es su experimentalismo. El problema es que, como Raül dice, My Girls te atrapa sin perdón y el resto es un dejarse llevar a ratos placentero y a ratos enervante que engancha sobremanera. Un guitly pleasure hecho de melodías pop bañadas en psicodelia setentera, coros a lo The Beach Boys y sintetizadores machacones, marciales con un destacado tono tribal que tiene la única intención de retrotraernos a la época más primigenia del ser humano. Lo que hizo un día la electrónica más pura lo consiguen ahora Animal Collective. Lo consiguen con la dulzura impostada de Summertime Clothes (y hablando de guitly pleasures, nada peor que escuchar esta canción en enero), con el mantra repetitivo al más puro estilo Hare Krishna de Lion in a Coma y la explosión de Bluish, un orgasmo musical que esperas durante las seis primeras canciones y que encuentra su resolución con ella. Pero el viaje no acaba aquí, no esperes un bajón porque todavía queda el final de fiesta con Brotherspot, el clímax a una experiencia musical única que deviene en estos seis minutos finales que te obligarán a darle al play de nuevo. En definitiva, es un disco adictivo, enérgico, estimulante y alegre. La flipada que cualquiera elegiría si en el momento de meterse un lsd le dejaran escoger qué tipo de experiencia lisérgica quisiera vivir. Sí, a mi me gustaría pillar un globo de Animal Collective.

news4girls. Primavera Sound meets Pitchfork Media


R: Estaba cantado. Lo extraño es que no hubiera sucedido antes. Primavera Sound y el monstruo-indie-tendencioso Pitchfork Media por fin hacen coincidir sus caminos. La organización del festival barcelonés ya ha anunciado que la mayor novedad de esta edición será la inclusión de un escenario gestionado por los de Pitchfork (¿esto significa que "la mayor novedad" no será hacer el festival también en Madrid, como parecía indicar que el Primavera Club sí que lo hicieran en las dos ciudades?). Los nombres confirmados para ese escenario, como no podía ser de otra forma, son totalmente Pitchfork-friendly: Crystal Antlers, Ponytail, Wavves, Crystal Stilts, Plants & Animals, The Mae Shi, The Tallest Man On Earth (ojo: pop sueco a la vista!!), Bowerbirds (folk! folk! folk!)... y los dos nombres que más gracia nos hacen: Vivian Girls y The Bug. Las primeras, una girl band punkera con la Motown en vena. El segundo, reaggetón cachondón para fin de fiesta (esperamos). Sea como sea, seguimos a la espera de algún "bombazo" en el cartel como los de años precedentes: Portishead, bla, bla, bla.

E: Pues eso, PS en estado puro. Amparados en el boom (para algunos, no para mí, personalmente) de las dos actuaciones de My Bloody Valentine a là Portishead 2008, siguen en la línea de ir conformando un cartel educativo con algunos golpes de efecto, en la mayoría de los casos, súper apetecibles. Estamos a la espera de la confirmación de Wilco (que se dice, se rumorea que volverían a visitar el Parc del Fòrum, lo que los convertiría en los Chemical Brothers del indie), la de Sonic Youth y Pavement. Igual me equivoco y solo repiten a Animal Collective, en cuyo caso a mí me harían extremadamente feliz.

viernes, 9 de enero de 2009

dosmilocho4girls. Lo mejor del año

  • Viva Piñata 2. Y que la gente nos mire mal cuando mantenemos conversaciones sobre Dragonaches o Horstachios.
  • La proliferación de festivales... y la corroboración de una escena musical llena de eventos y oportunidades.
  • El boom de grupos nacionales. Ya era hora.
  • El declive del imperio americano... cinematográfico. Viva el indie europeo (La cuestión humana, 4 meses 3 semanas 2 días, Las horas del verano...)!
  • Que ver series se ha convertido en un arte. Las nuestras: Mad Men, Lost, Dexter...
  • La política femenina: no sabemos si somos más fans de De La Vega o de Espe.
  • La existencia de Popjustice, El Cliché, Jenesaispop y FugAndBusted. Nos han hecho el año más llevadero.
  • Que por fin hemos visto resurgir de sus cenizas a Brit...antes incluso de lo que esperábamos.
  • El primer viaje de music4girls a Londres.
  • Que nos dejaran pinchar en el Razz.
  • El directo del Omega de Morente y Lagartija Nick en el Primavera Sound: piel de pana.
  • Rock Band, Guitar Hero y tocar las guitarras hasta las mil de la mañana compartiendo cervezas.
  • El abuelo marica que cantaba Dusty Sprinfield en los intermedios del concierto de The Zombies en el Shepherd´s Bush Empire.
  • Que Kylie está saliendo con un modelo gironí y eso garantiza que la tendremos más a menudo por nuestras tierras, aunque sea de visita ociosa.

dosmilocho4girls. Lo peor del año

  • El hype MGMT. Si no nos los hubieran machacado tanto, aún nos gustarían y todo.
  • La proliferación de festivales... la sangrada al bolsillo y la necesidad de escoger.
  • Que al final hayamos acabado aborreciendo un poco Ven a cenar conmigo (por mucho que al principio nos flipara).
  • Que vuelven las series para adolescentes... y nos sentimos viejos.
  • El auge y caída de Amy Winehouse. Somos tan fans que nos duele.
  • El directo de Ladyhawke en la sala Razzmatazz: un timo en toda regla.
  • El homenaje a Los Planetas en el Auditori...lo que pudo haber sido un acontecimiento histórico resultó ser una cosa bastante anodina de la que no se ha hablado más.
  • Que todavía no había terminado 2008 y ya estábamos esperando el nuevo disco de Antony, el de La Morrissey y el de Passion Pit.
  • La muerte de Paul Newman... ya no se hacen hombres así.
  • El suicidio de David Foster Wallace.
  • Que el directo de Glasvegas en el Summercase solo durara veinte minutos. Supo a muy poco.
  • Los precios de algunos conciertos, realmente abusivos.
  • Escuchar hablar CONTINUAMENTE de la puñetera crisis.

miércoles, 7 de enero de 2009

dosmilocho4girls. Canciones 2008

R: Nuestra segunda lista, como no podía ser de otra forma, se centra en las canciones que han marcado el pasado 2008. Aquí no tuvimos duda alguna: I'm not gonna teach your boyfriend how to dance with you de Black Kids es, sin duda, un temazo que nos entró como una bala en la sien y se quedó alojada en nuestro cerebro. Pasan los meses y sigue ahí, palpitando cada vez que escuchas el tema. Por eso es nuestro número uno. El número dos teníamos claro que sería Glasvegas, pero supongo que la elección del tema es más bien cosa mía: It's my own cheating heart that makes me cry ha sido, probablemente, una de las canciones que más a menudo he puesto en repeat en mi iPod. En cuanto al resto, dejo mucho para que comente Estela sus favoritos. Por mi parte, me quedo con ese Sleepy head de Passion Pit que finalmente pusimos en el número 10 para que sepáis que os vamos a dar mucho el coñazo con ellos en el 2009; con ese If I know you de The Presets que me hizo recuperar la esperanza en la música de baile burraca; esa Brinni que sabíais que iba a estar más arriba o más abajo (aunque, con el corazón en la mano, reconocemos que el logro del temazo de Robyn es SUPERIOR); ese Inside a boy de una My brightest diamond que siempre nos roba el alma... Y ese Blind de Hercules & Love Affair que hemos metido al final de la lista como statement absoluto: sí, nos molaba y nos mola. Pero, señores y señoras, el flipe que se han marcado en otras listas con este tema es, simple y llanamente, excesivo.



1. Black Kids - I'm not gonna teach your boyfriend how to dance with you
2. Glasvegas - It's my own cheatin heart that makes me cry
3. Robyn - With every heartbeat
4. Lady GaGa - Just dance
5. Fleet Foxes - White Winter Hymnal
6. Sons & Daughters - Guilt
7. The Last Shadow Puppets - My mystakes were made for you
8. MGMT - Kids
9. The Ting Tings - Shut up and let me go
10. Passion Pit - Sleepy Head
11. The Presets - If I know you
12. Yelle - Je veux tu voir
13. Ladyhawke - Back of the van
14. The Black Ghosts - Anyway you choose to give it
15. Britney Spears - Womanizer
16. Neon Neon - Told you in Alderaan
17. Jape - Strike me down
18. My Brightest Diamond - Inside a boy
19. Annie - Song reminds me of you
20. Hercules & Love Affair - Blind

E: Lo que más nos ha enternecido al ver la lista completa ha sido ver resumido un año entero en veinte canciones. Estas han sido las que más hemos escuchado, las que más nos han flipado y las más representativas para nosotros del año bisiesto más polémico de la historia de los años bisiestos. Cómo no, tenía que estar Lady GaGa, ese Just dance fue un temazo con el que Raül apabulló a propios y extraños y que yo no supe valorar hasta que lo oí sonando a toda pastilla la noche que pinchamos en el Pop Bar. También era necesario incluir alguna de aquel tremendérrimo This Gift, y entre Darling y Guilt nos quedamos con la segunda porque tiene los mejores quince segundos iniciales de todo el año. Quedó claro que MGMT han sido el hype del año (mucho más que Ting Tings), pero Kids está ligada a muchas cosas: a nuestro viaje a Londres (Raül cual visionario ya previó que "los ibamos a tener hasta en la sopa"... y así fue), a aquel concierto del Primavera Sound (y a su guitarrista del que nos hicimos fans) y a los comentarios en los lavabos; y en definitiva ha sido una de las canciones más destacables del año. Destacable también fue el concierto de Yelle en el Razz: nos flipó su savoir faire y nos flipa y mucho el electro reventón de Je veux tu voir. Ladyhawke nos sorprendió con su particular manera de entender los ochenta, lástima que la producción de su disco no tiene nada que ver con su directo, que resultó ser, básicamente, un timo. Pero Back of the van es nostálgica, ensoñadora, dulce y nos recuerda que fue ella, y solo ella, la que nos hizo entender el concepto de camisas oversized. The Black Ghosts también nos regalaron un temazo pistero que disfrutábamos mucho los viernes antes de salir del curro; Neon Neon nos cansaron pronto pero Told you in Alderaan sigue siendo la mejor canción de su disco. Jape entregó un album discreto pero efectivo y nos enamoramos de Strike Me Down desde el principio y a Annie simplemente la adoramos, como adoramos su dance pop pijo sin pretensiones.