R: ¿Qué entra? Para empezar, entra Portishead en el número uno. ¿Mejor disco del año? Dadnos unos meses y ya veremos, ya veremos. Quien espere bromas al respecto de la afición a la bebida de la Gibbons, que siga sentado. Porque por aquí la respetamos más todavía que a De la Vega. También entran a tope The Presets, esos mozos que podrían definirse con una ecuación tan bizzara como "The Knife + The Klaxons + David de Akelarre". Sí señor: David de Akelarre. Como lo oís. Porque temas como This boy's in love o My people no desentonarían en el Nocturna (si es que aún existe). Entra Madonna, aunque no "totalmente". 4 minutes es uno de los temazos de la temporada, de eso no hay duda. Pero un buen día escuchamos el bootleg anónimo que alguien hizo de esta canción junto al Breaking the ice de La Brinni y, desde entonces, las preferimos así. Bien revueltas. A la que queremos bien solita es a Shara Worden, también conocida como My Brightest Diamond. Se nos ha hecho difícil elegir sólo una canción de su magnífico A thousand shark's teeth, así que al final nos hemos quedado con To Pluto's Moon, una bella epopeya (que no "una poyeya") de casi 7 minutos que te deja con los pelos como escarpias y un reguero de babita en la comisura de tus labios. Los siguientes dos "entradas" son más movidas. Para empezar, Black Lips y su sonido garagero. Tienen muchos jitazos en su disco de debut (Good bad not evil), pero Bad Kids destaca por un toque doo-wop que te hace desear un re-make de Dirty Dancing protagonizado por una pareja de rockabilis. Y, casi al final de la lista, hacen acto de presencia Zeigeist, ese grupo que suena The Knife (de nuevo) y que saquea sin vergüenza el Running up that hill de Kate Bush. ¿Que suena a pastiche? Sí. Pero si nos tragamos el "taims gous bai con Loli", ¿por qué no íbamos a tragarnos esto? Y con mucho gusto. Temazo bailable desde ya.
E: ¿Qué sale? Salen tantas cosas como entran (obviamente). Mayo es un mes primaveril, de cambios estacionales y de humores, y esto se ve reflejado en la lista mensual de music4girls.
Salen Hercules & Love affair, a falta de que defiendan en directo su tratado disco de tintes tanto melancólicos como atrevidos (aunque haya más atrevimiento por parte de Antony que preferiría hacer una colaboración con una hermandad del Rocío antes que sacar disco propio), en music4girls queremos aparcarlos hasta que nos demuestren que son tan buenos como (mucha, cada vez más) gente pretende vendernos.
Salen Black Kids. Tienen un look terrible (lo cual sería motivo suficiente como para relegarlos a las galas de Tienes talento) y aunque esta canción nos arrebató de primeras, hasta el momento no disponemos de más material interesante que justifique su presencia en la lista. Cuando (por fin) salga su larga duración, ya se verá.
Sale Yelle. Porque la banda sonora de un estilo "de moda" suele ser tan caduca como el estilo mismo. Y aunque con esta mierda de frase parezco un profesor de Comunicación de cualquier universidad cutrebarata, lo que vengo a decir es que el tecktonick era guay y tenía su coña, pero se veía que no iba a durar mucho. Y A cause de garçons provoca el mismo impacto que el bailecito, de entrada mola mucho, pero luego aburre un poco.
Sale Cloud Cult, no porque lo merezca en sí, que nos arrebata, sino porque su plaza debe ser ocupada por nuevas entradas que lo merezcan. My Brightest diamond sería una...
Sale Neon Neon porque el disco está bien pero seamos sinceros... no es para tanto. Y no es que no nos siga encantando I told her on Alderaan, pero tampoco es cuestión de salirse de madre. Rachel y Lust you nos gustan más. ¿Que por qué no están en la lista? ¡Por que como todo en la vida, lo mejor es lo que viene más tarde !
Por cierto, esto es una anotación para que Raül se entere de una vez: el Nocturna, después de unos pequeños "devaneos" internos que lo cambiaron de local, cerró hace unas semanas. Una pena. Los garitos goticosos de Barcelona están condenados y siempre acaban chapando. Quien quiera escuchar a The Presets a todo trapo en un local, tendrá que espere a la próxima sesión de music4girls.
R: (Esto es una postdata: ¡qué chungo que cerrara el Nocturna! ¡Y sin la necesidad de que pincháramos nosotros antes como "catalizador" del cierre!)
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