E: Estamos a final de año. Y no sabemos vosotros, pero nosotros ya tenemos los bolis preparados para hacer las listas de lo mejor de 2008 desde hace semanas. Somo así de ansias. Y aunque este año la reunión tendrá que ser más "informal" que la del año pasado, el resultado será igual de sorprendente. Pero no avancemos cosas, y centrémonos en la última lista mensual de este año. Tomadlo como nuestro personal regalo de
Navidad. Todavía estamos un poco hangovered con el single adelanto de
Circus, somos más fans de
Britnew que nunca, pero es hora de dejar reposar
Womanizer hasta que volvamos a pinchar. En esta lista estamos más patrios que de costumbre: la escena actual está dando mucho de sí, y nosotros felices de no tener que mirar allende los mares para encontrar cosas interesantes.
Klaus & Kinski nos robaron el corazón con su actuación en
La [2] (sobre todo
Marina, la cantante, con su encantadora actitud de no saber muy bien qué pintaba en el escenario), pero ya antes habíamos flipado en colores con muchos de los temas de
Tu hoguera está ardiendo. El que se lleva la palma es
Mengele y el amor, un bolero, ¿bolero? sí, señor, un bolero con reminiscencias políticamente incorrectas. Lo que se dice con un par. También nos ha robado el corazón
Supercrepus de
Joe Crepúsculo. Premio del mes al disco más intenso y por su práctica forma de distribución. ¿Lo quieres? Te lo puedes descargar directamente de
su página. Y aunque es difícil quedarse con una de las veinte canciones del disco, nos quedamos con
Caja de lluvia porque la canta junto a
Internet 2 y somos muy fans de
Internet 2. Y porque es la más dulce y naif de todas y nos encanta. Entra
Damien Jurado con
Gillian was a horse, la canción más pop de su reciente disco y uno de los singles del año para la que escribe. Vuelve
Lady GaGa con
Poker Face. Misma fórmula que con
Just Dance e idéntico resultado. Tema bailongo sin pretensiones. Sal gorda, que diría
Raül. Pero, ¿acaso no es la sal gorda la que se usa para los mejores estofados? Pues eso. Nos flipan
Lady GaGa, su calcomanía facial y la poca vergüenza que tiene. Si no, no se explican esos estilismos. Y finalmente entran
The Wave Pictures en un módico último lugar, pero ya les pega. Pop lo-fi, que le llaman, con sabor a clásico instantáneo.
R: Me extraña que
Estela no haya comentado nada al respecto del aterrizaje de
Marianne Faithfull como disco absoluto del mes: ha sido la única entrada en la que no nos poníamos de acuerdo a la hora de elegir una única canción. Por varios motivos: porque el álbum en sí es inabarcable (18 canciones... ¡ninguna de relleno!), porque contiene pildoritas como la que ya destacamos en nuestros
in&outs y, sobre todo, porque le tenemos cariñín a la
Faithfull. Todos tenemos un corazoncito de groupie, ¡para qué lo vamos a negar! Por otra parte, hemos mantenido a
Passion Pit porque es nuestra apuesta para grupazo indie bailable del año (por mucho que todavía no tenga claro si canta realmente el tío que posa en las fotos o su prima en su primera menstruación). ¿A alguien le sorprende ver que
Glasvegas están de vuelta en nuestra lista? Después de haberla acaparado casi a lo largo de este año, vuelven con novedades: un mini-LP navideño del que os hablaremos en breve y entre el que destaca un temazo como
Fuck You, It's Over... que, ya sabéis: si fuera una película, llegaría traducida a nuestras pantallas como
Blanca Navidad Para Siempre o algo así. Seguimos con nuestro apoyo absoluto a lo patrio: en este caso, con
Tu Madre. Merecen estar en nuestra lista por muchas de sus canciones, pero sobre todo por haber firmado una composición en la que la letra se reduce a "
estaba tumbada en tu tumba recordando el tacto de tu pelo / uuuuhhhhh / baila morena la danza de la muerte". De quitarse el sombrero. Estamos deseando verlas en directo. También repiten
Grand Archives: ya hace un par de meses que escucho este disco a piñón. Y no se gasta. Y no se rompe. Y si encuentra algo mejor... nada, porque no vas a encontrar nada mejor. Cierran la lista
The Wave Pictures: invaden tarde nuestro top, pero eso será porque aún estamos planteándonos si nos flipan o si, simplemente, nos gustan. La respuesta, en breve. O no.
